MIERENSES DE ADOPCIÓN: La historia de Hilario

Ya les contamos que en este apartado alternaremos: una semana, una historia de uno de los “Mierenses por el mundo”, otra, una historia de uno de los “Mierenses de adopción”. Esta semana toca leer la historia de una de los segundos, más en concreto, de Hilario.


“No me voy a enrollar mucho que no quiero parecer pesáu. Llegué a Mieres con diez años procedente de un rincón de la provincia de Cáceres junto con mis padres. Él entró en Minas de Figaredo y mi madre se encargó de mantenernos a mí y a mis tres hermanos. Durante muchos años estuvimos alquilados en un piso de San Pedro. Yo estudié en el Teodoro Cuesta y luego anduve haciendo cosuques hasta que a los diecinueve entré a trabajar en Ensidesa. Me casé a los veintiséis con una carballona que tuvo que dejar la capital pa venir pa Mieres, donde ahora vivo en el centro.

Después de más de cuarenta años aquí ya perdí el acento extremeño pa coger el asturianu, porque, aunque no nací aquí soy asturianu y mierense y en Mieres nacieron mis dos hijos y aquí está enterrado mi padre”


No se olviden. Buscamos “Mierenses de adopción”, gente que, haya recalado en este concejo y que, sin ser mierense de nacimiento, se sienta como tal. Pueden enviarnos sus historias a través del correo o de Facebook.

Igualmente buscamos historias de “Mierenses por el mundo”. No hace falta residir en el extranjero. Basta con vivir fuera de Mieres (y, lógicamente, fuera de Asturias). Pueden contárnoslas a través de la página de Facebook o mediante un correo a elblogdelmierense@gmail.com indicando en el asunto: “por el mundo”.

Pueden adjuntarnos fotografías, vídeos… Todo lo que nos envíen saldrá publicado.

Contamos con ustedes.

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