LAS CRÓNICAS DE PLAUTO: Depositados en el depósito

Creo que de lo que voy a hablarles esta semana ya se ha hablado alguna vez, y por alto, en el “Usted denuncia”. Aunque estuve buscando en nuestra hemeroteca propia, no he encontrado la entrada en cuestión, aunque ya les digo que me suena que se trató alguna que otra vez en esa sección (la memoria pocas veces me falla).
Sintiéndolo por los que no les gusta que se hable de Oviedo, me veo en la obligación de hacerlo para introducir el tema que voy a tocar esta semana. En la capital existe un gran depósito municipal de vehículos, ubicado en La Argañosa, donde van a parar todos aquellos coches que se lleva la grúa o que resultan embargados, entre otras circunstancias.
Cada X tiempo, el Ayuntamiento de Oviedo saca a subasta pública aquellos vehículos libres de cargas que se encuentran en el depósito municipal y que han pasado a ser propiedad del Ayuntamiento (porque nos los han reclamado sus propietarios, porque provenían de embargos hechos por la propia administración local…). Las subastas suelen funcionar y los coches se venden a buen precio o incluso son comprados por desguaces, o, en algún caso, el propio Ayuntamiento se los queda para usarlos como vehículos municipales. Todo esto me lo contaba hace un par de meses un conocido que trabaja en el ámbito administrativo del Ayuntamiento de Oviedo.
No me pareció mala idea, se gana sitio, se gana algún dinero para las arcas municipales…
El tema quedó en el olvido hasta que hace unos días, dando un paseo por la zona de la Renfe, me acordé de ello y me acerqué hasta el depósito municipal de vehículos que Mieres tiene, ubicado al lado de las instalaciones de Emutsa. Me sorprendió la materia que allí había: un Peugeot 206 Sw, un Focus, un Xsara y un par de Meganes en aparente buen estado; varios Fords y camiones de una empresa de ventanas y puertas de aluminio que echó el cierre hace cuatro o cinco años… ¡y hasta un Volkswagen Touareg, con sus asientos de cuero!
Estando ojeando apareció un ‘nenu’ de unos diez u once años que me había visto desde la zona de La Estación y había pasado por un subterráneo que hay bajo las vías del tren. Estuvimos allí, charlando un rato de coches. Me comentó que el Touareg llevaba ya tiempo allí y que había coches que ya ni se veían porque la maleza se los había tragado.
De vuelta a casa me dio por mirar cuánto cuesta sacar un coche del depósito si se lo ha llevado la grúa. Un coche son, de base, 63,51 €, más luego 12,82 € por cada día que pase allí. Casi nada… Sinceramente creo que los dueños de los coches que llevan allí meses (o años) intenten recuperarlos.
¿Por qué no hacer entonces como en Oviedo y subastar lo más ‘apetecible’, siempre que esté libre de cargas? Por probar una vez yo creo que no se pierde nada, además, algún ingreso, por poco que sea, está garantizado. 

Comentarios

Xurde ha dicho que…
Nun yera mala idea, y vense coches buenos que tovía puen sirvir...
DIOGENES ha dicho que…
En alguna ocasión estuve viendo los vehículos de ese deposito y muchos de ellos están o estaban en muy buenas condiciones.
Lo que si esta claro es que si están ahí es que tienen algún tipo de carga, por multas o por otro tipo de deudas. La única manera de darles salida es por subasta publica para que quien los compre les queden libres de cargas. Si no es así, el comprador, se puede encontrar con un problema si sobre el vehiculo pesan otros requerimientos por otro tipo de cargas. Lo se porque en una ocasión quise comprar una propiedad pagando la deuda que el dueño tenia con el banco, antes de llegar a la subasta y me lo desaconsejaron porque, según me explicaron, existía otra deuda, en otro banco, vinculada a esa propiedad. Como no lo adquiría en subasta publica, en el juzgado, el segundo banco podía pedir el embargo y su subasta. En ese caso, la única opción que me quedaba era pagar la segunda deuda porque, como es lógico, el deudor no lo haría y después rezar porque no existieran mas deudas.
Desconozco lo tramites que tiene que hacer el ayuntamiento para subastar esos vehículos pero todo apunta a que, en este tema, existe cierta dejadez y desinterés en abordar el asunto.