USTED DENUNCIA: Una casa que amenaza con venirse abajo / Una caleya más transitada por culpa del 'foto-rojo'

Como cada semana, les ofrecemos dos nuevas denuncias enviadas por nuestros lectores. ¿Qué deben hacer para enviarnos sus denuncias y quejas, siempre que versen sobre asuntos relacionados con Mieres? Contactar con nosotros en elblogdelmierense@gmail.com, o también por vía Facebook o Twitter.

Pueden enviarnos escritos, vídeos, audios, imágenes, presentaciones en Power Point... Solo dos requisitos: la palabra ‘denuncia’ en el asunto del mail o del mensaje de Facebook o Twitter y, para los documentos gráficos, sí que pedimos que se adjunte una pequeña explicación de lo que se pretende denunciar.

Elvira nos traslada hasta Santullano con su denuncia para mostrarnos el estado en que se encuentra un edificio muy próximo a la carretera. Nuestra lectora comienza contándonos que “después del susto de lo de Figaredo [en relación a la casa que se vino abajo hace unas semanas, sepultando una ambulancia que pasaba por allí] creí conveniente mandaros esta queja”.

“En Santullano, un poco antes de llegar a la casa de los Sela, en la otra acera, existe una casa que está igual o peor que la de Figaredo: sin tejado, sin paredes por dentro y únicamente con el armazón”.

Según palabras de Elvira, “tener ese edificio así es un peligro. Si se derrumba como pasó en Figaredo puede pasar una desgracia, porque aquí hay mucho más tráfico que allí, la carretera es más estrecha y puede perfectamente alcanzar a alguien que pase por la acera de enfrente”.

Seguimos con la denuncia de Ana, que nos habla de una de las consecuencias que ha tenido la instalación de un nuevo ‘foto-rojo’ en Requejo.

Nuestra lectora se queja de que “hay muchos conductores que si van para Murias o Rioturbio para evitar que les pille y les multen tiran por la cuesta de Arriondo para salir así a donde la panadería de La Ascensión, sin semáforos y sin que les pueda pillar el cacharro ese. Lo peor es para los que vivimos en Arriondo-Aguaín, ya que esa cuesta es muy estrecha y, en la pequeña curva de donde la casa natal de Teodoro Cuesta no hay ningún tipo de visibilidad, con lo que los sustos y las maniobras son muy frecuentes”.

Concluye diciéndonos que “antes esto que os cuento lo hacían, pero es que ahora se nota muchísimo el aumento del tráfico por esa cuesta”.

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