UN LUGAR PARA VIVIR: La Llosa Alfonso

La parroquia de Lloreo cuenta con una extensión de casi diez kilómetros cuadrados, abarcando desde Ablaña hasta La Vega San Pedro, límite de los concejos de Mieres y Morcín.

Esta semana nos dejamos caer por una pequeña aldea, perteneciente a esta parroquia, y que lleva por nombre LA LLOSA ALFONSO.

LA LLOSA ALFONSO es, pues, un pequeño pueblo de la parroquia de Lloreo formado por siete viviendas. Como se aprecia en las fotografías, todas las casas son antiquísimas, están hechas de piedra y gran parte de ellas tienen, además, corredor. En un par de ellas aún se observa el esquema ‘clásico’ de vivienda en el piso superior y cuadra en el de abajo.

Además de las casas, esta aldea, situada a 480 metros de altitud, cuenta con una panera y un hórreo, ambos muy bien conservados, así como un lavadero ubicado en la parte alta del pueblo, al que se accede subiendo una cuesta de apenas treinta metros, con más del treinta por ciento de pendiente.

Aunque el censo del 2013 no recoge a nadie censado en esta localidad, es más que evidente, que no se trata de una aldea abandonada (de hecho nosotros encontramos a mucha más gente aquí que en otras aldeas mucho más grandes).

Dista siete kilómetros y medio de Mieres y un poco más de dos respecto a Lloreo.

Un paseo recomendable por la zona, cargado de cuestas, algunas con más del 30% de pendiente, es el P.R. AS-36, o sendero del Valle de Lloreo, que, empezando en Lloreo, asciende por todo el valle que hay por encima del pueblo, llegando hasta LA LLOSA ALFONSO y pasando previamente por otras aldeas que ya hemos mostrado.

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