Al casco urbano de Mieres se accede,
desde la autopista, por dos salidas: una, desde Vega de Arriba; otra, desde la
Avenida de México. En la primera, un puente desemboca en una rotonda a la que
no le falta el más mínimo detalle: césped, el nombre de Mieres puesto con
pequeños bojes, un letrero en el que se informa de las ciudades con las que
está hermanada Mieres… Una rotonda muy agradable de ver, que además está
siempre cuidadísima.
La otra entrada desemboca en Avenida
de México previo paso por una rotonda que es la antítesis de la de Vega de
Arriba, con la superficie pintada de un azul claro y con cuatro pilares que
sustentan la A66 a su paso por encima. Cuatro pilares que están cargados de
pósters de fiestas, de campañas electorales y de lo que surja. Y ya. No hay
más.
*Glorieta de entrada a Mieres por Avda. de México. |
¿Cómo es posible que en un concejo con
grandísimos artistas, como El Séptimo Crío, a nadie se le ocurriera hacer de la
rotonda y de los pilares que sobre ella están una especie de mural, colorido,
vivo, con referencias a Mieres, que indique a todo aquel que entre por ahí a la
villa que se encuentra en ella? ¿Por qué no aprovechar las dos paredes que hay
a ambos lados de la rotonda, en unas isletas donde suele ser habitual ver a la
Guardia Civil buscando presas, para hacer otros murales que den la bienvenida y
despidan (ya que hay dos paredes, una en cada sentido) a todo aquel que entra y
sale del concejo por esa zona?
Hace unos meses, uno de los
columnistas ‘locales’ de “La Nueva
España” (no recuerdo cuál era, tengo dudas entre dos, de ahí que no dé
nombres para evitar equivocarme) de lo feo que era el lavadero de El Batán y de
lo feo que parecía a todo aquel que llegaba a Mieres. Hace nada, aquí se
debatía sobre una propuesta de cambio del sentido de circulación de un par de
calles para que la entrada a Mieres parezca más atractiva. A mí me parece mucho
más fea y, lo peor, totalmente desaprovechada, esa rotonda que, pocos metros
más allá de El Batán, permite acceder al casco urbano. Y es una pena, porque es
de lo primero que ven muchos de los que vienen a Mieres.
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Comentarios
Por cierto sigo esperando a que el Principado ponga una triste señal en el cruce de la Coca indicando que por ahí se va al hospital. Además ese cruce horrible debería ser una rotonda, mucho más práctico y menos peligroso.
Debe ser la suerte de tener al presidente del Principado originario de Mieres...
También llevamos décadas esperando por los aparcamiento de al lado de la estación de RENFE, en el solar ese que había cedido ADIF, para los aparcamientos junto al Hermanos Antuña, para lo del río Duro que sacaís aquí cada dos por tres.
Todo ello actuaciones básicas para mejorar la imagen de la ciudad y los servicios que necesitamos los ciudadanos y no faen naaaa...
Porque lo de al lado del Hermanos Antuña ye lamentable, tola gente que bien a traer a los chavales a jugar al fútbol e intentar aparcar ahí, ven la imagen de Mieres tercermundista que realmente es lo que somos.