El 8 de enero de 2008 comenzaban las
obras de construcción del nuevo Álvarez Buylla. Santullano se preparaba para
recibir al eje de la actividad sanitaria en el área VII, un hospital cuyas
viejas instalaciones de Murias se habían quedado obsoletas.
Cuando EL BLOG DEL MIERENSE comenzó a publicarse, hace once años,
las obras del nuevo hospital avanzaban a buen ritmo.
En los años posteriores fuimos
testigos del avance de las obras y de cómo poco a poco el hospital iba
desvelando sus distintas fachadas.
Más de 57 millones de euros y casi
seis años después del comienzo de las obras, el 19 de diciembre de 2013 el
nuevo hospital abría sus puertas para acoger el servicio de rehabilitación,
prestado hasta entonces en la calle Ramón y Cajal, en un local alquilado. Cinco
meses más tarde, en mayo de 2014, se produjo el traslado del grueso de
la actividad sanitaria y el nuevo Álvarez Buylla echó a andar, oficialmente.
Mientras esto sucedía en Santullano,
el antiguo complejo de Murias se quedaba vacío. Las persianas cerradas y las
restricciones de acceso marcaron los primeros días sin actividad de un inmueble
que hoy, casi seis años después, permanece abandonado y sin visos de uso.
Estas
imágenes con las que terminamos el reportaje son ya historia de la sanidad
asturiana.
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