Tres son las parroquias administrativas que componen el valle de Turón: Figaredo, Turón y Urbiés, tal y como puede verse en el Decreto 9/2009, de 13 de febrero, sobre la toponimia oficial del concejo de Mieres. En esta ocasión visitamos SAMENINO, un lugar perteneciente a la segunda de esas parroquias administrativas.
Cinco viviendas componen SAMENINO –también conocido, en castellano, como San Benigno–, un lugar perteneciente, como antes comentábamos, a la parroquia administrativa de Turón. Se encuentra situado a unos 450 metros de altitud sobre el nivel del mar y dista en torno a diez kilómetros de Mieres.
Ninguna persona aparece censada en este lugar, que, pese a ello, no se encuentra para nada abandonado. En materia de etnografía, nos encontramos en este lugar con un hórreo, bastante deteriorado, y una cuadra de piedra, como algunas de las viviendas. También de piedra es el puente que da la bienvenida al lugar, uno de los últimos vestigios ligados al pasado minero de la zona que se conservan. Frente a él se localiza un área recreativa construida sobre una antigua escombrera recuperada como espacio verde.
SAMENINO contó también, en época de la minería, con algo más de una docena de cuarteles, derribados en los años 80, y en los que vivían los trabajadores del grupo San Benigno, una de las explotaciones mineras con más solera del valle de Turón y del que todavía se conservan, en El Llegu (Lago), los cargaderos, un túnel y parte de un antiguo plano inclinado.
La carretera que une Villapendi con Tablao, la MI-12, es un buen paseo para conocer esta zona, con poco más de dos kilómetros de trazado, sin mucha dificultad y con muy poco tráfico. Si lo hacen, disfrutarán de un paisaje repleto de bosques y praderas como las de la antigua escombrera, hoy área recreativa, en las que descansar y disfrutar de las vistas que desde allí se observan de la zona central del valle de Turón.
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