REPORTAJE-HOMENAJE: Despidiendo a Enferbus

Han sido varios años de duro combate entre la ciudadanía mierense y la tiranía de un empresario inepto e ineficiente, que por pura desidia y dejadez, ha llevado al colapso a una empresa de transportes antaño poderosa y respetada, querida y admirada, ejemplo del espíritu emprendedor mierense. Esa batalla intensa ha pasado por multitud de demandas, reclamaciones, huelgas y hasta sabotajes para, finalmente, terminar con un resultado a priori positivo.

El pasado viernes salía publicada por fin la confirmación de lo que era un secreto a  voces, que la empresa de transportes Bimenes, más conocida por su nombre comercial “Pullmans Llaneza”, se había hecho con la concesión de las líneas que Enferbus tenía bajo su yugo. Las golosas rutas entre Mieres – Oviedo y Oviedo – Mieres – Pola de Lena por autopista, son ya propiedad de una empresa que ha demostrado en los últimos meses su eficacia y también inteligencia, al hacerse con Recollo y en su día Álvarez Gonzalez.

Consigue así tener casi el monopolio del transporte de viajeros por carretera en toda la Montaña Central a excepción de Emutsa, que sigue operando (al menos de momento) en Mieres a la espera de la llegada de esos famosos recortes que se producirán en breve y que nos van a hacer mucha pupa. Pero el motivo de este artículo es decirle adiós a la conocida aun coloquialmente “Empresa Fernández”, nombre primigenio de la firma cuando está aún operaba con cierta profesionalidad y eficacia; ya tendremos tiempo de comentar el tema de Emutsa.

Recuerdo cuando era niño y empezaba a aflorar mi afición por el mundo de los autobuses, esta empresa era todo un referente con vehículos estupendos y preciosos, clásicos Setra y Mercedes copaban su flota. Fui testigo de la evolución de algunos de ellos y cómo se ha ido modernizando a medida que pasaban los años, claro está solo puedo hablar de la etapa que transcurre desde principios de los 90.

*IMAGEN: Pegaso Azahara.

Por aquel entonces, unos espectaculares autobuses llegaron a la empresa, de los cuales alguno de ellos sigue en funcionamiento; me refiero a los preciosos “Pegaso Azahara”, de los cuales adquirió 4 hermanos (cuatro iguales), rotulados a diferencia de los anteriores vehículos de la flota, con un color blanco predominante frente al rojo, que hasta entonces era el color que primaba frente al blanco. Esos coches han aguantado lo indecible, creo que han reportado mucho beneficio a la empresa y su belleza es innegable, la carrocería es preciosa, en su día eran lo máximo y ahora, si estuviesen cuidados, aún podrían dar servicio de calidad de la misma forma que los Mercedes 0404 de Alsa siguen activos, teniendo la misma antigüedad.

*IMAGEN: Camelsa Yethero.

También recuerdo con cierto cariño a la pareja de robustos CamelsaYethero Gold, Volvo B10 y sus otros dos hermanos pero con motor Pegaso. Esos coches tenían varias peculiaridades, como el motor en la parte central del autobús. Eran unos coches cómodos, de gran potencia, andaban bastante bien y destacaba de ellos la espectacular altura que en las curvas hacía que pareciera que iba a volcar, era toda una aventura, pero a duros no los ganaba nadie. Por otro lado, los SetraJupiter eran también famosos, sobre todo por sus dos pisos, que bien se iba en las alturas.

*IMAGEN: Iveco Eurorider.

Luego empezaron a llegar los IvecoEurorider, coches relativamente económicos y eficaces, de los cuales siguen en curso casi todos pero ya destrozados. Estos fueron por así decirlo los últimos trabajos de la empresa Pegaso propiamente dicha tras su absorción por Iveco. Estos Eurorider 35 destacaban por su mensaje en la parte trasera “Para su comodidad, soy más largo que los demás”, y en cierto modo era verdad que eran más grandes y por tanto entraba más gente. Si no recuerdo mal vinieron en tandas de cuatro, el 214, 216, 218 y 220 son los Ivecos, todos en servicio (al menos 3 de ellos).

Un poco más tarde llegaron los Volvo, con la misma carrocería y numerados con el 222, 224, 228 y 230 si no me equivoco. Estos son los que se conservan mejor, al menos externamente, y si Guillermo Llaneza quiere salvar alguno, sería seguramente uno de ellos.

*IMAGEN: Iveco Ayats.

Luego tenemos todavía muy presentes los conocidos como “Santina”, que son el 200 y el 202, se trata de unos Ayats preciosos, con una carrocería de las más bellas que se han diseñado y que hasta hace poco llevaban parados en cocheras que se yo cuanto tiempo, de hecho hasta hace no mucho me parece que rondaban solamente los 180.000 Km de rodaje, piensen amigos lectores que ese kilometraje en más de 10 años es ínfimo y ridículo. Así fue que con el paso de los años quedaron inútiles para servicios escolares y otras rutas que requieren cierta legislación moderna, por lo que nunca se han podido aprovechar y es como tener coches medio nuevos sin uso pero estériles. Ahora empiezan a verse en línea más regularmente y claro, los ves que están tan nuevinos y tan cuidados que piensas que son nuevos, pero nanai de la china. Su mayor handicap radica en su cambio manual, lo que ralentiza enormemente al coche y los hace ineficientes para el servicio de cara a casco urbano.

Después están los mircobuses o minibuses, dispone de un puñado de ellos, pero todos destrozados también o llegados ya de segunda e incluso tercera mano, IvecoDaily, un CarbusIveco, una Sprinter… Actualmente creo que todos los micros han llegado en activo hasta este fin de vida de la empresa.

*IMAGEN: El "Cazurrón".

Y por supuesto los grandes trastes de la empresa como el “Cazurrón”, que sigue por ahí dando guerra y que es lo más tercermundista que pueda haber, ya no solo por lo antihigiénico que es sino por lo soberanamente feo y alguno que otro más como aquellos pegasones de autos Olloniego que daban pena verlos.

Como anécdota, para los que no se hayan dado cuenta, este lechón numeraba los vehículos de 2 en 2 para aparentar que tenía una flota inmensa, por eso todos los coches van por pares, 200, 202, 204, 206… Una estrategia bastante pueril que ocasionó conflictos internos como el error de numeración en un IvecoEurorider (216) que fue numerado igual que la pequeña furgoneta Daily, luego en esta empresa hay dos coches 216.

No menos singular y simpática resulta la numeración que le puso al traste este venido de León, le puso el 74 a uno y el 80 a otro (porque vinieron 2, pero uno está desguazado), como dando a entender que son coches viejos y que siguen funcionando pero que eran de él hace años, cuando por orden de llegada a la empresa, esa aberración de autobús tendría que ser el 232. Pero claro, con un 230 que es un Volvo B12, ¿cómo vas a poner ese trasto, que es un Unicar 5000, carrocera que ya ni existe con una numeración superior?

*IMAGEN: Volvo B12.

En fin, son muchas las anécdotas, los recuerdos, y las comedias vividas en estos autocares y en esta empresa, invito a los lectores habituales del blog a comentar alguna de ella, a opinar en este mismo post publicando los autobuses que recuerdan y sus vivencias; pero me gustaría terminar este artículo no como lo venía haciendo siempre desde hace tiempo, quejándome, sino con sabor agridulce.

Aunque en los últimos años este señor dirigente llevó al traste una empresa como esta, antaño fue una gran prestadora de servicios y yo prefiero quedarme con aquellos recuerdos, aquellos autobuses prominentes, aquella época sin crisis ni mierdas de estas… Una época mejor en muchos aspectos que lamentablemente ya no volverá.

Sea como sea, adiós Enferbus, muchas gracias por tus servicios pero no vuelvas más…. Para mí muere Enferbus pero vivirá por siempre “La empresa Fernández”, y espero que no se confunda porque aunque algunos coches sean los mismos, ni por asomo se trata de la misma empresa.

Un saludo, y bienvenido Llaneza.

 -MIGERU-

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