Un Ayuntamiento relativamente pequeño, como el de Mieres, puede servir de trampolín para que quienes pasan por él den el salto a esferas políticas superiores. Sin ir más lejos, se vio en mayo con Delia Campomanes, que dejó de ser edil para convertirse en diputada autonómica. En fechas más recientes se ha vuelto a ver esa función trampolín de la mano del primer senador que sale del Ayuntamiento en décadas y que confirma la meteórica carrera política de un hombre que llegó a este mundillo un poco por casualidad. José Manuel Rodríguez, Lito, es senador desde el pasado 14 de septiembre.
Y es senador porque así ha sido elegido por la Junta General del Principado, dentro de la cuota de senadores establecida por designación autonómica. Nacido en La Nueva, Llangréu, a comienzos de 1963, Lito celebra sus sesenta años de vida con un nuevo cargo, doce años después de irrumpir en la escena política local. Corría el año 2010 cuando este ingeniero de Minas se acercó al Partido Popular. Durante una comida con María Teresa Mallada, entonces presidenta del partido en Aller, le surgió la posibilidad de convertirse en candidato a la Alcaldía en las municipales de 2011. "Tras reflexionarlo mucho y con la aprobación de mi familia, acepté", reconocía a este medio en aquel entonces. Los resultados electorales fueron un desastre y el PP pasó de siete ediles a cuatro, tras unos años convulsos a nivel interno. Contra todo pronóstico, en 2015 los resultados fueron aún peores. Lito repitió como candidato y se hubo de conformar con tres ediles. Para es entonces, el ahora senador ya era presidente del Partido Popular de Mieres, cargo al que accedió en septiembre de 2014, en sustitución de Carlos Galcerán. Su reelección como candidato y su nuevo cargo en el partido no fueron muy bien aceptados en un sector de la formación, que, a unos días de las elecciones de mayo de 2015, filtró los gastos que Lito pasaba al partido, unas dietas que en cuatro años sumaban 28.000 euros. "Fue un robo de documentación, con amenazas hacia mí y anónimos en medios de comunicación llevados a cabo por un grupo mínimo y totalmente identificado, guiado por el despecho al no ver colmadas sus aspiraciones políticas", explicó en esta web en mayo de 2015.
Tras una segunda legislatura como edil, portavoz y presidente de los populares, en 2019 decidió ceder el testigo en las urnas a Fernando Hernández. Se mantuvo como presidente de los populares en el concejo y comenzó a ostentar cargos de responsabilidad en el Partido Popular de Asturias, entonces regido por María Teresa Mallada. Así fue como nuestro protagonista se convirtió en secretario de Caza y Pesca y en vicesecretario general de Organización. Desde el 14 de septiembre es, como les decía, senador por designación de la Junta General del Principado. En principio, los populares mierenses seguirán contando con él como presidente, pues nada se ha dicho en sentido contrario.
Comienza una nueva etapa en la trayectoria política de un hombre que, por lo que me han contado, siempre me ha costado encajar en la idiosincrasia del Partido Popular. Lo he tratado muy poco, pero sé que empezó compaginando la mina con un negocio de frutas y que fue, durante años, un destacado militante de CC.OO.
Sea como fuere, la vida nos lleva por caminos insospechados y solo cabe desear suerte a aquellos que los transitan.
ELCARABA
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