Como sabrán los que me conozcan, suelo
estar siempre al pendiente de todos los bandos, avisos y demás historias que
salen del Ayuntamiento firmadas por nuestro Alcalde, tanto para lo bueno como
para lo malo.
Hace una semana más o menos me
sorprendieron dos bandos, muy bien redactados y con una claridad y sencillez
muy buenas en los que se insta a varias cosas. En el primero de ellos Aníbal
José Vázquez Fernández y su Corporación ‘animan’ a los propietarios de solares
en desuso a adecentarlos, que precisamente era algo que pedía un lector hace
unas semanas en el "Usted
denuncia";
así como a propietarios de edificios o casas a que las pongan monas y les
arreglen sus descolchones, canalones y bajantes rotas o en mal estado y demás
arreglos que pueda precisar un edificio.
Claro, todo esto, y ahí viene la parte
positiva, sin ningún tipo de tasa ni sin tener que pagar nada al Ayuntamiento,
siempre que se haga este año, y eso sí, le sea comunicado al Ayuntamiento.
En el segundo de los bandos parece que
Aníbal y compañía me hubieran leído la mente, porque era precisamente de lo que
tenía pensado hablarles esta semana: el estado deplorable de muchos locales que
están sin uso en el casco urbano. Así quienes nos gobiernan instan a los
propietarios a “mantenerlos en las
citadas condiciones de seguridad, salubridad y ornato públicos, restableciendo
los materiales de acabado exterior a su estado inicial. Todos aquellos que
presenten además pintadas antiestéticas tienen la obligación de pintar la
fachada de forma que presente un aspecto uniforme y adecuado al entorno”.
Al margen de lo que se pueda entender
como “pintadas antiestéticas” (hay
locales cuyas fachadas son antiestéticas en su totalidad), que daría para otro
artículo, comentar que también se les concede la posibilidad de poner guapos
esos locales y bajos comerciales sin que se les cobre ninguna tasa ni nada por
parte del Ayuntamiento, siempre que se les informe de la obra.
Aunque sea algo que está contenido en
un Decreto de 2004 y venga a aplicarse diez años después, es algo que a mí me
parece muy bien: permitir a los dueños de inmuebles (edificios, locales y
solares) que los adecenten sin necesidad de pagar ningún tipo de tasa (algo es
algo), solo con comunicarlo al Ayuntamiento y que este lo autorice.
No sé si funcionará o no, aunque yo,
si fuera propietario de algún local o solar de esos abandonados que hay por las
calles lo haría ya que ambos bandos concluyen señalando que o bien se hacen las
mejoras a lo largo del año o el Ayuntamiento podrá, de oficio o a instancia de
cualquier interesado, ordenar la ejecución de las obras con el correspondiente
apercibimiento al titular del inmueble.
Vamos, que valdrá más hacerlo por las
buenas que por las malas.
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