Durante el verano, principalmente
julio y agosto, las grandes y medianas ciudades tratan por cualquier medio de
tener “entretenidos” a los que se
quedan sin vacaciones, a la par que intentan atraer turismo por medio de
diversas actividades culturales y lúdicas.
Ahí está Gijón, con su Semana Negra,
su Feria Internacional de Muestras, el Festival Aéreo, varios mercadillos y
festivales… Lo mismo podría predicarse de Oviedo o de Avilés, y en menor
medida, de otros muchos concejos asturianos.
En el caso de Mieres, el verano ha
estado de lo más entretenido y cargado de actividades: conciertos de distintos
géneros musicales durante dos días a la semana en el parque; obras de teatro en
la Casa de Cultura y en el Ateneo; tres mercadillos (premedieval, medieval y
renacentista); rutas senderistas de tipo cultural organizadas por diversos
entornos naturales del concejo… Hemos tenido de todo.
*La C. de Cultura redujo horario de apertura en el verano. |
Vale, que mucha gente se va. Pero
muchos otros se quedan. Y ya que se quedan, deberían ofrecérseles cosas como
las que mencionaba antes. Hemos tenido un verano con mucho sol, que se podía
haber aprovechado para montar, qué se yo, un mercadillo en el parque
Jovellanos. Podrían haberse organizado torneos deportivos, conciertos, teatro
en la calle… Pues nada de nada. Y me queda por comentar otro detalle: la Casa
de Cultura, al igual que el Ateneo de Turón, cerrados por la tarde, un año más,
durante todo julio y agosto. Se agradece que, de lo malo, no cerraran la
piscina de Vega de Arriba o el Polideportivo de Oñón por la tarde. Porque ya
puestos…
No es que haya habido poco… ¡Es que no
ha habido nada! Tal parece que la concejalía de Cultura hubiera estado cerrada
también por vacaciones. Solo se organizó, y me parece genial, un campamento
urbano para críos. Nada más.
¿Dónde quedaron los Conciertos del Valle?
¿Qué fue de las rutas para patear todo el concejo (que no el casco urbano) que
años atrás se organizaron? ¿Por qué no se siguió, después de recuperar dos
socavones cercanos, con el tema de las visitas guiadas por las instalaciones
mineras del valle de Turón? ¿Por qué, en definitiva, no se pensó en dotar de
algún contenido cultural o lúdico a estos meses de verano?
El que ha querido entretenerse,
culturalmente hablando, en el Mieres veraniego lo ha tenido difícil. Más allá
del mercado dominical y las vinotecas, no ha habido mucho más. Más que ciudad
dormitorio, Mieres pareció este verano una ciudad tanatorio.
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Comentarios
Igual pal 2016 taba bien que ficieran un o dos mercadillos o feries de distintos temas per les cais del conceyu, tan siquiera pa animar algo esto.
Entre lo único cultural que se programó este verano estaba la proyección del documental "Poca Ropa", de Capellín Corrada. Como la Casa de Cultura tenía horario de 9:00 a 14:00 y no era plan proyectarlo muy temprano, se optó por hacerlo a las 12:00, y en tres sesiones. Manda narices.
Debe ser que les cansa hacer el programa de San Xuan, con la organización que implica, que luego en julio y agosto no hacen ni programan nada.
Muchas veces, por falta de perras. Otras muchas, de público.