HISTORIAS DE NUESTRA HISTORIA: Sin décimos para el sorteo de Navidad (1990)

Que no cunda el pánico, que todo indica que para el próximo 22 de diciembre sí hay lotería de Navidad en las administraciones del concejo. 
La noticia, en El Comercio del 22 de diciembre de 1990

No sucedió lo mismo en 1990. El 4 de diciembre de aquel año se agotaban todos los décimos que Loterías y Apuestas del Estado había remitido a las cinco administraciones que había en el concejo. En una época en la que aún no existía el décimo electrónico, quienes esperaron a los días previos al sorteo para tentar a la suerte tuvieron que comprar décimos fuera de Mieres o consolarse con las participaciones que todavía vendían distintos establecimientos y asociaciones.
¿Qué sucedió para que en Mieres se agotasen los décimos? Un día de Santa Bárbara multitudinario, con grandes actos y festejos tanto en Mieres como en Turón. Miles de mineros de toda Asturias y parte de León y sus familiares vinieron a pasar el día al concejo y, de paso, compraron lotería. A ellos se sumó, seguramente, alguno de los seis mil mineros con los que contaba el concejo en aquella época.
Así las cosas, a dieciocho días del sorteo, las administraciones colgaban el cartel de “décimos agotados” y cerraban el balance de ventas del sorteo extraordinario de Navidad. De las cinco administraciones que había en Mieres habilitadas para vender Lotería Nacional, una despuntó en ventas. Fue la de Turón, con más de 50 millones de pesetas. Tras ella, la número tres, situada en la calle Carreño Miranda, facturó unos 25 millones. Esa misma cifra logró la número uno, ubicada en la calle Jerónimo Ibrán.
24 millones de pesetas ingresó la desaparecida administración de la calle Palacio Valdés y 22, la número cinco, situada en la calle Manuel Llaneza. En total, las cinco administraciones sumaron 146 millones de pesetas en ventas.
El desabastecimiento de décimos sería hoy algo imposible. Desde hace una década Loterías y Apuestas del Estado opera con un sistema informático que en caso de agotarse los décimos tradicionales permite que se sigan vendiendo décimos electrónicos, a partir de un cupo reservado para toda España. 

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