Dos de las plazas más emblemáticas del casco urbano protagonizan este nuevo Cómo han pasado los años, la plaza de la Constitución y la plaza de Requejo.
En el caso de la primera, el protagonismo se lo lleva el ayuntamiento. En la postal de comienzos de los años 80, el consistorio luce su fachada en blanco y gris y mira a una plaza en la que no faltan árboles.
En la actualidad, el rojo y el blanco dan color a una fachada que apenas ha sufrido cambios en estas cuatro décadas. Alrededor la plaza, nuevos edificios hacen acto de presencia, al igual que algunas sombrillas de las terrazas de bares y restaurantes que han convertido a esta plaza en uno de los puntos álgidos de la hostelería mierense.
Respecto a la plaza de Requejo nos es imposible entrar en valoraciones sobre colores, ya que la imagen antigua, extraída de un diario regional de finales de los 80, es una imagen en blanco y negro.
El Escanciador de Sidra, que se colocó en 1982 en el centro de la plaza, preside esta imagen, en la que se ven las terrazas de las sidrerías a rebosar. Debemos aclarar que la fotografía actual fue realizada en un día con lluvia y pocos clientes para evitar los filtros de Google y Blogger, que impiden cargar fotografías en las que se puedan reconocer muchas personas. De haberla realizado en un día con sol, estamos seguros de que habría tanta o más gente que en la imagen de hace casi cuarenta años.
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