Viajamos casi siete décadas en el tiempo para visitar el Turón de los años 50, una época en la que el valle vivía su auténtico apogeo industrial.
Muestra de aquel apogeo son los vagones que se observan en la primera de las imágenes, vagones que cruzaban la carretera en Cauxal o Cabojal, a través de un cable y un puente de madera. Casi siete décadas después, la carretera luce despejada, con el bar Cabojal, cerrado desde hace años, en primer plano. El único resto industrial que se aprecia en nuestra fotografía es la chimenea de la antigua central termoeléctrica de La Cuadriella, datada entre 1914 y 1920. Una cuestión de perspectiva le impidió hacer acto de presencia en la instantánea tomada hace 68 años.
Subimos un poco más, hasta La Felguera, para contemplar el puente de la localidad, popularmente conocido como puente romano, dada su semejanza con algunos construidos en época romana.
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La maleza del río impide distinguir bien el puente, que se encuentra abierto al tráfico rodado, para lo que fue necesario construir sobre él una nueva calzada, más amplia que la que tenía. En torno al puente, La Felguera conserva en buen estado las mismas casas que ya aparecían en 1953.
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