ÁLVAREZ OPINA: Patinetes y peatones, o cómo regular una convivencia necesaria

Parecía que no iban a llegar a colonizarnos, como sucedió en las grandes ciudades, pero, poco a poco, el uso de patinetes eléctricos comienza a generalizarse por las calles de Mieres.

Como en todo, no se debe hacer pagar a justos por pecadores. Hay usuarios que cumplen con la normativa y los hay que la ignoran por completo y hacen uso del patinete por las aceras o con más de una persona montada en él. Hace un mes o algo más la Policía Local les recordaba a unos chavales en La Villa que en un patinete solo puede ir una persona, tras sorprender a dos cruzando la calle Ramón y Cajal en uno de estos vehículos.

Porque sí, un patinete eléctrico es un vehículo a motor, aunque a algunos se les olvide. Y han empezado a colonizar espacios tradicionalmente vetados a vehículos a motor: los paseos y sendas peatonales del concejo.

Estamos en una época, el verano, en el que todos los paseos suman gente que sale a caminar, a correr o a andar en bicicleta y que este año sumarán también patinetes. Ya lo están haciendo. Cuando hablo de paseos, pienso en el fluvial, en la senda verde del valle de Turón, en el que une Mieres y El Carbayón, en el de El Batán y La Peña… Todos ellos comparten unas mismas características físicas y una misma señalización, basada en dos tipos de señales. Una primera, la de zona compartida con prioridad peatonal, que permite a las bicicletas circular a un máximo de diez kilómetros por hora, siempre dando prioridad a los peatones, y una segunda, de prohibido circular, a veces con el sobreañadido de "solo vehículos a motor", como ocurre con varias señales del paseo fluvial. También hay una, en ese mismo paseo y en dirección a Ablaña, de prohibido circular coches y motos "excepto vehículos de servicio".

Parece ser que, según todo esto que acabo de explicar, los patinetes eléctricos estarían vetados en el paseo fluvial y demás sendas por ser un vehículo a motor. Sin embargo, la realidad es bien distinta y todo apunta a que, como digo, en julio y agosto se van a ver muchos en este tipo de vías.

Hay grandes ciudades que ya han desarrollado mediante ordenanzas la normativa de circulación aprobada hace un par de años por la DGT. Creo que es algo que debería plantearse el Consistorio, no solo de cara a regular la circulación de patinetes particulares sino, incluso, el arrendamiento de patinetes u otros vehículos de movilidad personal públicos. Sé que puede resultar descabellado, pero hace diez o quince años lo era pensar que la gente se iba a mover en patinetes eléctricos… Y es lo que está ocurriendo. Se dice que los vehículos de movilidad personal son el futuro, así que quizás convenga anticipar acontecimientos.

Lo que sí que se puede hacer desde el presente es recordar que peatones y patinetes compartimos espacio en muchas ocasiones. Prudencia para unos y otros. Responsabilidad para quienes llevan un vehículo. Es un vehículo, no un juguete.

Buen verano. Nos seguimos leyendo en septiembre.

Álvarez