Recibimos la primavera como solo nosotros sabemos hacerlo, hablando de Mieres y recorriendo el concejo en busca de las historias de hoy, ayer y mañana.
Álvarez es la encargada de abrir esta edición con un Álvarez opina en el que se pregunta por qué, cinco años después de anunciarse una sala de estudio en La Mayacina, la sala sigue sin ponerse en funcionamiento pese a estar ya terminada. A continuación abrimos El espacio del lector para Dani, que aplaude la idea de aumentar las frecuencias de los autobuses búho entre Mieres y Oviedo.
Tras ello, les descubrimos qué Está pasando en Mieres, con fotografías sobre la reforestación de Reicastro o la nueva imagen del puente de La Belonga, y repasamos lo más destacado de la actualidad local. En Oñón y el entorno del Campus se localizan las dos denuncias del Usted denuncia que les ofrecemos en esta edición.
El bloque cultural viene cargado. En Un lugar para vivir visitamos El Colléu, una aldea cargada de etnografía perteneciente a la parroquia de Urbiés. En Historias de nuestra Historia recordamos a Hortensia, la abuela de Cenera, una mujer que vivió a lo largo de los siglos XIX, XX y XXI. Seguimos tirando de hemeroteca en Publicaciones de antaño para hojear la revista Pico Polio. Y sí, surcamos los cielos, metafóricamente hablando, para un Cómo han pasado los años desde el aire.
Teodora cierra esta edición con su Mieres, 2036, y nosotros ponemos la guinda, ya que les avisamos de algo: en abril cumplimos 15 años y vamos a celebrarlo como es debido.
Esperamos que les guste todo lo que les hemos preparado.
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