MIERES EN CORTO: "Mieres del Camino" (1927)

La historia del cine producido en el concejo se inicia con un pequeño cortometraje, de poco más de media hora de duración, rodado hace casi un siglo. Hablamos de Mieres del Camino.


Mieres del Camino es un cortometraje de ficción rodado en 1927 íntegramente en exteriores. Fábrica de Mieres, el valle de Cuna, Barreo y distintos enclaves del casco urbano, como Les Cases Barates, son los escenarios de un corto con el amor como eje. Los mierenses Josefina Gutiérrez, José Menéndez y Gaspar Campomanes protagonizan esta historia, con personajes que heredan sus nombres.
El corto, enmarcado en el cine mudo, presenta a Josefina Meca, Pepina La Melona, una joven perteneciente a uno de los linajes con más abolengo de la zona. Un día conoce a Pinón, un minero de Barreo del que se enamora. La pareja no convence al padre de Pepita, don Gaspar Meca, porque tiene reservado para la chica un mejor partido, Ruperto, un indiano de mucha fortuna que está a punto de regresar a Mieres. Sin embargo, un día Gaspar presiente en sueños que el matrimonio de su hija con Ruperto solo traerá desgracias a la joven y accede a que se case con Pinón.
La casa de don Gaspar es el palacio de Viade, situado en las proximidades de Cuna. En el valle se ruedan, además, algunas escenas en las que don Gaspar conversa con unas jóvenes que le preguntan por la boda de su hija. El paisaje contrasta con el paraje industrial de Fábrica de Mieres que abre el cortometraje o el Barreo en el que Pepina conoce a Pinón.
Merecen especial atención la boda de los protagonistas, acontecida un año después de conocerse, que tiene lugar en el antiguo convento de los Padres Pasionistas y la fiesta posterior, que se rodó en el campo de Las Moreras.
Entre las localizaciones, también cabe comentar una última, que apenas se vislumbra al inicio del corto: el antiguo puente La Perra derribado tras la riada de 1926 que se lo llevó por delante.

Mieres del Camino se rodó gracias a la aportación económica hecha por Gerardo Pombo, uno de los magnates del cine y el teatro en el concejo durante buena parte de la primera mitad del siglo XX. La dirección corrió por cuenta de Juan Díaz Quesada. Pese a que se estrenó en el Cinema Princesa, en Madrid, y se vio en otros espacios de Asturias, como el teatro Dindurra, en Gijón, de la cinta se produjeron escasas copias, tan pocas que durante décadas se creyó que solo existía la que conserva, de forma incompleta, la Filmoteca Española. En 1980 apareció otra, por azar, en el almacén del Cine Esperanza, que permitió restaurar la cinta.
En internet circula gracias a la copia digital que hace casi dos décadas editó La Voz de Asturias con base en la copia reconstruida a partir de la conservada en la Filmoteca Nacional y la hallada en el Cine Esperanza. Les dejamos con el cortometraje:
 

Comentarios