La parroquia de Cuna es una de las dos parroquias que forman el valle del mismo nombre. Con 425 habitantes, esta parroquia encierra lugares como el que nos ocupa en esta edición: EL PUMARÍN.
De una forma muy curiosa, que ya les contaremos en la próxima Hoja de ruta descubrimos este lugar, que no aparece referenciado ni en el Decreto 9/2009, del Principado de Asturias, sobre la toponimia de Mieres, ni en el nomenclátor estadístico de la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales, Sadei.
En Insierto nos dieron más información al respecto, explicándonos que EL PUMARÍN es el nombre que recibe un conjunto de prados situados en las proximidades del santuario de los Mártires, un conjunto de prados en el que también se encuentra una antigua casa, en ruinas y cubierta en gran medida por la vegetación.
Las tierras de EL PUMARÍN eran prolíficas, pero ello no bastó para que la vivienda se quedase sin habitantes hace unas cuatro décadas, según nos explicaban en Insierto. De ella solo se contempla hoy un corredor y parte de la fachada lateral que da al camino que conduce a la ermita desde la carretera entre Insierto y Casaviedra.
Precisamente, ese camino y esa carretera permiten dar un buen paseo por la zona. El antiguo camino entre Insierto y Casaviedra es hoy una carretera asfaltada que se recorre sin mucha dificultad, disfrutando de los paisajes del valle.
De ella parte el más empinado sendero que conduce a la ermita de San Cosme y San Damián y que permite toparse con vestigios de un pasado eminentemente agrario y ganadero del valle, de lo que dan cuenta la casa y las tierras de EL PUMARÍN.
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