"Todavía no se ha abierto el proceso de primarias en el partido, y por tanto, de eso ya tocará hablar en su momento […] No lo tengo decidido y no es por ninguna incertidumbre. Habrá tiempo para pensarlo y ver qué hacemos". Con estas palabras respondía Aníbal Vázquez a la pregunta que muchos nos hacemos, la de si repetirá o no como candidato a la Alcaldía. Se pronunciaba al respecto en el marco de una entrevista publicada en La Voz de Asturias el pasado 21 de noviembre.
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Quienes tengan buena memoria recordarán otra entrevista que el alcalde concedió al diario El Comercio en diciembre de 2018. Le hacían la misma pregunta. Su respuesta era exactamente la misma, aunque con otras palabras: "Queda pendiente la conversación que hay que tener en casa con la familia y con el partido. Pero hay margen para eso. No está decidido". Semanas más tarde se anunciaba que repetía como candidato a la Alcadía. Personalmente, creo que es lo mismo que va a pasar esta vez, aunque el tiempo lo dirá.
Salvo sorpresa, no creo que nadie se atreva a disputar nada a Aníbal y los suyos en las primarias de IU Mieres. De hecho, estoy convencido de que si Aníbal se presenta, obtendrá sin problemas ese amplio respaldo –un mínimo del 60% de la militancia– que demandan los estatutos de Izquierda Unida como excepción a que un cargo público electo pueda permanecer en el mismo cargo más de dos legislaturas u ocho años.
Imagino que desde el partido no quieren arriesgarse a sufrir un hipotético desgaste electoral, algo que han esquivado en los últimos dos comicios, en los que Aníbal no dejó de subir, hasta alcanzar los quince ediles con los que su Gobierno cuenta en la actualidad. Cabe pensar que sea más fácil mantener ese resultado con la misma carta ganadora que intentarlo con otra y que el resultado no sea el deseado. Y ojo, no es que falten cartas ganadoras en la baraja de IU. Estoy convencido de que Manuel Ángel Álvarez, Delia Campomanes o Juan Ponte bien podrían suceder a Aníbal al frente de la lista electoral y garantizar la mayoría absoluta.
En cualquier caso, Aníbal no cierra la puerta a seguir en la partida. Al contrario, la deja muy abierta. A comienzos de 2023 sabremos si, como parece, el regidor afrontará sus cuartas elecciones como cabeza de lista, de cara a una cuarta legislatura que lo llevaría a estar en política, como mínimo, hasta 2027. Si no, insisto en que el propio partido tiene buenas alternativas, caras y nombres de sobra conocidos por la ciudadanía, que pueden asegurar un buen resultado electoral en caso de que Aníbal no se decida a continuar, algo que, repito, no creo que vaya a ocurrir.
ElCaraba
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