ESTÁ PASANDO EN MIERES: De la restauración de la locomotora Riosa al repintado y reasfaltado de calles

Nueva ración de píldoras informativas ilustradas con las correspondientes fotografías para así conocer y ver qué Está pasando en Mieres.

Completada la restauración de La Riosa, la locomotora que da la bienvenida a quienes entran en el lavadero de El Batán.
Su restauración coincide con su centenario. Construida en 1924 por Haine Saint Pierre, comenzó su historia en Hulleras de Riosa, de donde pasó a Fábrica de Mieres. Sus últimos años de vida útil los pasó en Sovilla. El 14 de agosto de 1984 fue utilizada por últma vez, en el marco del Congreso de Amigos del Ferrocarril.
En 2016 vecinos de Riosa exigieron que Hunosa cediera esta locomotora al concejo, en el marco de una reclamación por el traslado de elementos industriales del municipio. Hunosa prefirió dejarla en El Batán, donde ahora luce restaurada y bajo techo, tras décadas a la intemperie.

El polígono industrial de Vega de Arriba estrena una nueva acera… hormigonada, sin baldosas.
Es algo que ha sorprendido a los usuarios del polígono. "Si la calle de atrás se embaldosó y quedó tan guapa, no entiendo por qué no se hizo lo mismo con las de la calle principal", nos explicaba un trabajador de uno de los concesionarios del polígono.
El polígono también estrena señalización vial horizontal en la calle posterior, con zona de tránsito para peatones incluida en la calzada.

Ronda primaveral de repintado y reasfaltado de calles. En los últimos días se han acometido labores en viales como las calles Siero y Pérez de Ayala.
En la primera de ellas se ha repintado la señalización horizontal. En la segunda, se ha parcheado el tramo comprendido entre Carreño Miranda y avenida de México, cuyo estado no era el mejor, dado el tráfico de vehículos pesados que soporta.

El valle de Cuna estrena marquesinas o casi. Las marquesinas colocadas hace apenas cuatro meses han sufrido un cambio de color.
El blanco y el barniz decoran las marquesinas, que, a diferencia de las anteriores, son totalmente ciegas a los lados.

La Semana Santa más lluviosa de las últimas tres décadas deja en Mieres un derrumbe. La borrasca Nelson pudo con el castillete de la residencia geriátrica de Santuyano.
La casualidad quiso que el castillete se viniese abajo sobre la valla del recinto, en un momento en el que nadie pasaba por la acera. No hubo que lamentar más que daños materiales. 

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