El Home Market llega a Mieres. Los próximos 17, 18 y 19 de enero tendrá lugar un mercadillo diferente, en el que todos los objetos puestos a la venta no son sino enseres de una vivienda de la calle Numa Guilhou, 6 y es precisamente esa vivienda la encargada de acoger el mercadillo. Charlamos con Marola Argüelles, gerente de Orden Vintage, para conocer qué es el Home Market y cómo será el que se celebrará en Mieres.
"El cliente necesita es que le vaciemos la casa en tres días, por lo que se ponen precios muy atrayentes"
–Cuéntanos, ¿qué es un Home Market?
–No es algo inventado ahora, ni mucho menos. Viene de Estados Unidos y de las ventas que ellos hacen cada vez que hacen mudanzas o cambian de año. Son muy de sacar las cosas que no necesitan a la calle o delante del garaje para que la gente las compre. También en Francia se ve mucho. Aquí en España empezaron a hacerlo en Madrid, donde ya lleva unos cuantos años.
No es otra sino intentar hacer un mercadillo dentro de una casa con las cosas que hay, casas que muchas veces son heredadas, que llevan muchos años cerradas, y sus propietarios quieren venderlas, alquilarlas o hacer una reforma. Por lo general, tienen cosas heredadas de sus abuelos y familiares y no saben qué hacer con ellas. Se han quedado con lo que tiene un sentimiento un poco más fuerte y no saben qué hacer con el resto.
El Home Market es hacer el mercadillo dentro de la propia vivienda para vender todo lo que hay dentro (muebles, vajillas, sábanas, utensilios de cocina, manteles…) para darle una segunda vida, que no acabe en la basura ni cree problemas. Piensa que antes se guardaba todo: los ajuares de hace cien años los guardaban las abuelas para las hijas, estas para las suyas… Hoy se ha ido perdiendo, ya no hay ajuar, pero son cosas que se fueron guardando, como las vajillas de cuando un matrimonio se casaba. La gente hoy es más funcional, pero siguen quedando personas que aprecian ese pasado. A través de los Home Market la gente trata de conseguir esas cosas del pasado y darles una segunda vida.
–¿Cómo llegan la casas? ¿Hay una búsqueda activa? ¿Contactan los propietarios?
–El cien por cien de las veces me contactan porque lo han visto en Instagram, que es la plataforma que ahora mismo más usamos, junto a la página web. La mayoría me contacta a través de Instagram, pero también hay gente que ha venido a algún mercadillo y le cuenta a un familiar de lo que hago. De cada casa suele salir otra.
–¿Cómo es el proceso que se sigue desde la primera toma de contacto hasta la celebración del mercadillo? ¿Cuánto puede llevar?
–Lo primero de todo es ir a ver la casa. Hay gente que piensa que no tiene mucho o que las cosas que tienen no puedan interesar. Hay gente que tiene en mente tirar cosas que luego son las más vendidas. Hay cosas a las que tampoco se les da el valor que tienen para otros: una simple cuchara de palo puede tener gente interesada en ella.
El primer paso es ir a ver la casa y las cosas que hay para el mercadillo. Tras ponernos de acuerdo, toca inventariar lo que hay. A veces no se hace un inventario del cien por cien de lo que hay en la vivienda, ya que el propietario puede querer quedarse con algún objeto. El inventario se completa con la tasación de todo lo inventariado y luego lo expongo por toda la casa: en la cocina, cosas de cocina; en el salón, adornos y objetos de valor… Es un poco como cuando vas al Ikea, que vas haciendo un recorrido por diferentes estancias. Se trata de hacer un recorrido por la casa, un recorrido bonito, para que las cosas que se exponen se vean bien.
Una vez que todo está inventariado y tasado, se etiquetan todas las cosas a la venta, con la descripción y el precio. Después, ya se abre la casa, que normalmente es viernes, sábado y domingo.
El proceso me suele llevar entre tres o cuatro semanas, dependiendo del número de objetos que haya en la casa.
–Aquí en Mieres este es el segundo Home Market…
–Sí, el primero en Mieres lo hicimos hace un año y medio. Fue la segunda casa que hice en Asturias, muy al poco de empezar, y esta de la calle Guilhou será la segunda.
Estoy muy agradecida a Mieres, ya que gracias a aquel primer mercadillo tengo un grupo muy fiel de gente del concejo que no se pierde ninguno. De hecho, hay un chaise longue verde en el conservatorio que salió de aquel mercadillo y me hace mucha ilusión verlo cada vez que hacen entrevistas o presentaciones.
También usaron objetos de nuestros mercadillos en otros actos, como la carroza del Festival de Sidros y Comedies de Valdesoto del pasado verano.
–¿Qué nos puedes adelantar de esa vivienda?
–Es una casa muy grande, con 160 metros cuadrados, si no recuerdo mal. Tiene un poco de todo, que es lo que a mí me gusta, pues tenemos muebles, menaje, textil, decoración… Es todo lo que nos encontramos en una casa: mantelerías, cristalería, adornos… Es un poco de todo, de variedad, que es lo que también le gusta a la gente.
–¿Entre qué precios, más o menos, va a moverse la venta?
–Eso es siempre igual. Puede haber cosas desde un euro o dos hasta lo más caro, que son los muebles, que tampoco es que sean caros. Cualquiera que vaya a comprar por ahí una vitrina de castaño o de cerezo antigua verá que menos de ochocientos euros no le cuesta. El valor en el que se mueve en los mercadillos es entre cien y doscientos, a veces trescientos. Al final lo que el cliente necesita es que le vaciemos la casa en tres días, por lo que se ponen precios muy atrayentes. No es como una tienda, que algo puede estar en el escaparate por tiempo indeterminado, aquí tenemos que venderlo en tres días.
–¿El Home Market va con entrada? ¿Hay que ir con cita o reserva?
–No. La entrada es libre. Sí que ha habido algunos casos en los que se hizo algo de cita previa para los viernes, pero era limitar la entrada de la gente, porque hay gente que igual solo puede el viernes y era limitar sus opciones de visita. El viernes es un poco locura, porque es el primer día, antes se suben fotografías a Instagram y muchos quieren ser los primeros para no quedarse sin algo de lo que ya han visto.
El viernes estamos de 16:00 a 20:30 h; el sábado y el domingo todo el día.
–¿Qué es lo más curioso que has encontrado en las casas?
–Suelen preguntármelo cuando me hacen entrevistas y nunca sé qué responder (ríe). En las casas suele haber cosas cotidianas, que todos tenemos en nuestras casas. Sí que a veces me encuentro con aparatos que me sorprenden, porque he hecho un par de casas que también eran clínicas, con instrumentos raros, de medicina, que no se ven en ningún otro sitio.
En la casa anterior encontré una piraña disecada, pero más allá de eso… Sí que es verdad que hay objetos que coinciden en las distintas casas, como la máquina Singer de coser de hace cincuenta años, que en todas o casi todas las casas aparece una. O las vajillas y tazas de Duralex verdes y amarillas, que también son muy repetitivas.
Pero objetos extraños como tal, no. La mayor parte de las cosas son cosas que tenían nuestras abuelas.
–Y ya para finalizar. ¿Cómo podemos estar al tanto de los nuevos mercadillos?
Normalmente se publicita siempre en Instagram. Hemos abierto TikTok, porque hemos visto que hay gente joven que nos sigue, que hay tirón. El contenido de Instagram también se publica en Facebook, ya que ambas redes están conectadas.
También hay un grupo de personas que viene a los mercadillos que no tienen redes sociales. Para ellos se creó un grupo de difusión en Whatsapp.
Galería fotográfica:
·Distintos objetos de la vivienda de la calle Numa Guilhou que se pondrán a la venta en el Home Market.
·Sofá del Conservatorio de Mieres adquirido en uno de los Home Market de Orden Vintage.
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