El Principado media para zanjar la crisis del Centro Social de Personas Mayores
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| Centro Social de Personas Mayores de Mieres |
El cambio de dirección en el Centro Social de Personas Mayores de Mieres ha desatado una tormenta en este centro, dependiente del Principado. "Se nos quiere imponer una dictadura", afirmaba a La Nueva España José Antonio Álvarez, presidente de la asociación de usuarios, que cuenta con más de 1.200 afiliados. La nueva dirección, a diferencia de la anterior, no permite a los usuarios organizar distintas actividades, como bailes, fiestas o talleres. Los usuarios también alertan del incremento del coste de algunas actividades, una subida que en algunos casos es de "más de un 60 por ciento".
La propia asociación de usuarios dio a conocer, además, que el centro lleva casi un cuarto de siglo abierto, pese a no contar con licencia de apertura y pese a que ellos mismso la han demandado al Principado. Fue la falta de licencia la que hizo que la nueva dirección denegase la celebración de la fiesta de Nochevieja, un clásico del centro.
La crisis fue solucionada el pasado 10 de enero, cuando desde el Ejecutivo regional, Enrique Rodríguez Nuño, director general de Promoción de la Autonomía Personal y Mayores se comprometió a agilizar la licencia y a devolver la gestión de actividades a los socios. "Nos prometió una gestión democrática, sin que la dirección pueda imponer sus decisiones unilateralmente", explicaba José Antonio Álvarez al término de la reunión celebrada en Oviedo.
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