Una grabación doméstica puede convertirse, con el paso de los años, en un bonito cortometraje documental. Fue lo que sucedió con un vídeo que Joaquín Esteban Álvarez grabó en Mieres en 1991.
Joaquín Esteban Álvarez, vecino de Olloniego, es un gran aficionado a la fotografía y al montaje de vídeos, como muestra en su canal de Youtube. Fue esa afición la que llevó a este jubilado de los Economatos de Hunosa a Mieres un 18 de septiembre de 1991. Aquel día, Joaquín Esteban recorrió, cámara en mano, unas cuantas calles y enclaves del casco urbano. Fue así como se grabó un vídeo doméstico que el paso del tiempo ha convertido en un auténtico cortometraje documental sobre la vida en el Mieres de principios de los 90.
El paseo, de dieciocho minutos de duración, da comienzo en el cruce de la calle Oñón y avenida de Sama, para, a continuación, enfocar la iglesia San Juan y Requejo. Las calles Teodoro Cuesta y Manuel Llaneza se dejan ver antes de llegar al Ayuntamiento.
La ruta continúa por una irreconocible calle La Vega, aun sin peatonalizar en su totalidad. La cámara hace sendos barridos por Alfonso Camín y Leopoldo Alas, para, tras ello, irse a Doce de Octubre y el entorno del grupo escolar Aniceto Sela.
El eje comercial del Mieres de la época es el protagonista de esta última parte del vídeo, con primeros planos de las oficinas de la Caja de Ahorros de Asturias, la plaza de abastos, el Salat o la Casa del Pueblo. El vídeo se halla musicalizado.
Disfruten de este cortometraje documental:
Es innegable el valor de esta pieza como muestra del Mieres de hace más de tres décadas. Comenzaban los 90, década de grandes inversiones inmobiliarias, como atestiguan los muchos edificios en construcción que se ven en este corto. Era una época en la que Manuel Llaneza era de doble sentido, las peatonalizaciones se estaban experimentando con La Vega, y, han de fijarse, en las calles no había apenas papeleras. Así era el Mieres de 1991.
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