El otro día me llegué hasta Reicastro a ver cómo habían quedado las obras de acondicionamiento del polígono, acabadas hace ya casi seis meses. Tengo que reconocer que no me ha disgustado nada lo que he visto, muy guapo, simple (una carretera para todo el polígono), con muchas plazas para aparcar y todo ya colocado: contenedores y demás mobiliario urbano (bancos, papeleras, farolas…).
También es un punto a favor que lo hayan conectado con el paseo fluvial para que la gente pasee por allí.
Sin embargo, no puede negarse que se ha comenzado la casa por el tejado, dado que para construir las naves, será necesario tocar las aceras ya construidas, cargarse el firme…
Por otra parte, solo espero que se cumplan las expectativas sobre la construcción de las naves, dado que la situación económica no es buena y sería una pena haber gastado, en tiempos de crisis, el dineral que ha costado urbanizar esos terrenos.
El tiempo lo dirá.
Comentarios