Formado por dos parroquias, tanto a
nivel eclesiástico como administrativo, el Valle de Cuna encierra en ambas
numerosos caseríos. En esta ocasión visitamos uno de ellos, perteneciente a la
parroquia de Cuna, y que tiene por nombre LLANDELOSO.
LLANDELOSO es un ‘lugar para vivir’ catalogado como caserío, perteneciente, como se ha dicho, a la parroquia de Cuna. Aunque no cuenta con nadie censado en él, el estado de las casas hace ver que allí aún no hay nada abandonado. Dista unos seis kilómetros de Mieres.
LLANDELOSO es un ‘lugar para vivir’ catalogado como caserío, perteneciente, como se ha dicho, a la parroquia de Cuna. Aunque no cuenta con nadie censado en él, el estado de las casas hace ver que allí aún no hay nada abandonado. Dista unos seis kilómetros de Mieres.
En lo que a etnografía se refiere,
como podrá verse en las fotos, las cuatro casas que componen este lugar son
casi todas de corredor, salvo una de ellas, que es de galería, bastante
deteriorada, eso sí. De piedra están hechas todas las casas y cuadras que hay
en el lugar, mostrándose una perfecta cantería en todas las edificaciones.
Junto a las viviendas hay un hórreo
con corredor y seis ‘pegoyos’. Podría ser una panera, sí, pero la forma de los
dos ‘pegoyos’ centrales y la estructura del hórreo hacen ver que esos dos
‘pegoyos’ extra fueron colocados o bien para dividir el bajo del hórreo o bien
para reforzar la estructura.
Existe también una fuente con balsa,
la fuente de Les Xanes, que aunque se encuentra bastante apartada de las casas,
está relativamente bien conservada.
Junto a todo esto, debe destacarse de LLANDELOSO
las vistas que ofrece de la otra ladera del valle (Insierto,
Villamartín, Sobrobio…) y, por supuesto, lo soleyero que es
este lugar, que a día de hoy no tiene más que un camino de tierra como
acceso.
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