El 27 de septiembre de 1990 era
jueves. Ello no impidió que el prau Socueto, situado en Llerón, a los pies de
Insierto, se llenase con motivo de uno de los conciertos más multitudinarios
que se recuerdan en el concejo: el que Víctor Manuel ofreció el día grande de
los Mártires.
Recorte del diario El Comercio |
La prensa local llevaba semanas pronosticando que sería “espectacular”, “grandioso” y “a todas luces, con mucha concurrencia”, entre otros augurios. Los pronósticos de los periodistas se quedaron cortos y unas 27.000 personas abarrotaron la finca para asistir a un concierto que además tenía entrada gratuita.
A las ocho en punto de la tarde Víctor
Manuel se subía al escenario en compañía de su esposa Ana Belén. Tras saludar
al público, comenzó el concierto con La
romería, inspirada en la fiesta de los Mártires. El recital se prolongó
durante algo más de dos horas, con un total de quince canciones y cuatro bises.
Uno de ellos, el bis de La romería, cerró
el concierto.
Terminado el concierto y tras una
breve pausa, Víctor Manuel volvió al escenario para recibir de manos del entonces alcalde Eugenio Carbajal, el
nombramiento de Hijo Predilecto de Mieres del Camino, aprobado por el Pleno del
Consistorio a finales de 1989. Emocionado, recogió la placa de plata y el
pergamino que el Ayuntamiento y el dibujante turonés Sabino del Viso habían
preparado para la ocasión. Entre
aplausos, Víctor Manuel se bajó del escenario, poniendo fin a una velada que
fue todo un hito en la historia del valle de Cuna y del concejo y que muchos de
los asistentes aún recuerdan.
La afluencia de público fue tal que la
Cruz Roja y Protección Civil tuvieron que atender a once personas, algunas de
las cuales tuvieron que ser trasladadas al Álvarez Buylla, a causa de
desvanecimientos, pequeños esguinces y algún que otro corte.
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