ESTÁ PASANDO EN MIERES: De los derrumbes en La Villa y Requejo al comienzo de las obras en la calle Langreo

Bienvenidos a una nueva entrega de Está pasando en Mieres, ese apartado que aúna píldoras informativas y fotografías.

Las inclemencias meteorológicas de los últimos días han propiciado que se hayan venido abajo parte de dos aleros de otras tantas viviendas abandonadas en La Villa.
Los números 161 y 168, ambos tapiados, son solo dos de las viviendas cuyo estado genera problemas en el barrio. Recientemente el Consistorio tramitaba el expediente de ruina del número 87. Más avanzada se encuentra la tramitación del expediente que afecta al número 161, iniciada en abril. El expediente es, oficiosamente, el paso previo al derribo.

La caída de cascotes a la vía pública es un mal que también padece otro barrio, Requejo. La Policía Local acordonaba hace unos días la fachada del número 10, muy cercano a la plaza del barrio, y hacía lo propio con la del número 8 de la avenida de Sama.
También en Requejo se han iniciado expedientes de ruina, que afectan al número 99 de Zarramín y al número 115 de la avenida de Sama.

Arrancan las obras de mejora de aceras y reordenación de aparcamientos en la calle Langreo. La empresa PJR Gestión S.L. es la encargada de llevar a cabo unos trabajos que se prolongarán seis meses.
195.227,45 euros es el presupuesto de unas obras que cambiarán el aspecto de este vial, que transcurre entre la plaza de Santa Bárbara y la calle Luarca.

EDP estrena cargadores de vehículos eléctricos en el aparcamiento del Campus de Mieres.
La empresa ha colocado recientemente los tres nuevos cargadores y ha procedido a pintar de azul oscuro las plazas del aparcamiento convertidas en puntos de recarga. 

Comentarios

Bif ha dicho que…
Esas casas de la villa ya hace meses o años que se les cayó el tejado (por suerte dentro del edificio), y hoy amanecimos con que parte del chalet de los Antuña se desmoronó.

Yo no entiendo cómo puede la gente preferir a que sus propiedades lleguen a ese estado antes que ponerlas en venta o darles un mínimo mantenimiento. Y si están en venta y nadie las compra, que no se den cuenta de que piden mucho para lo que es.

A ver el Esperanza cuánto tarda en derrumbarse también.