Último repaso a lo que ha dado de sí el primer año de legislatura para los distintos grupos políticos con representación en el Consistorio. Tras abordar los partidos de la oposición, hago lo propio con el del Gobierno.
En mayo de 2023 IU, bajo la marca Convocatoria por Mieres, en la que se integraron Más País Asturies e Izquierda Asturiana, IU revalidó su mayoría absoluta. Lo hizo, eso sí, con la pérdida de un concejal y 1.136 votos con respecto a 2019. En total, 10.270 mierenses, un total del 55,93% de los votantes, reafirmó la continuidad de IU al frente del Ayuntamiento, esta vez con catorce ediles.
El primer año de legislatura ha sido un año intenso para IU. Poco después de las elecciones se conoció que no seguían en el Gobierno local ni Juan Ponte ni Delia Campomanes, que, pese a concurrir en la lista, dieron el salto a la esfera regional. El Gobierno local perdía a dos de sus nombres más reconocibles. Entraron al Gobierno local César Menéndez y Beatriz Caridad Flórez, que volvía a ser concejala, pese a ocupar el decimosexto puesto de la lista electoral.
Poco después, los rumores sobre el estado de salud de Aníbal Vázquez comenzaron a asediar la labor municipal. En noviembre, cinco meses y medio después de ganar sus cuartas elecciones, el regidor fallecía y, dos semanas más tarde, Manuel Ángel Álvarez se convertía en el nuevo alcalde de Mieres. La muerte de Aníbal Vázquez obligó a la entrada de un nuevo concejal, Miguel Ángel Martín, y la reorganización del Gobierno local.
Así las cosas, el Gobierno local mantiene a tan solo seis de los concejales de la legislatura pasada, amén del alcalde. Quizás sean las de Manuel Ángel Álvarez, María Teresa Iglesias, Ana Belén Alonso, Francisco Javier García o Luis Ángel Vázquez sean las caras más conocidas de este Gobierno local. Las nuevas han sabido dar continuidad a los grandes aciertos de sus predecesores. Ahí están Rocío Antela y César Menéndez apostando por la peregrinación cultural. También Álvaro Andrés abogando por mantener las cuentas saneadísimas, al más puro estilo de Manuel Ángel Álvarez. Ha sido un acierto Nuria Ordóñez en Medio Ambiente, con más actividades y una mayor apertura a la ciudadanía que su antecesor. Igualdad y Feminismo está en buenas manos con Nuria Rodríguez, aunque día sí y día también sea cuestionada por quienes no acaban de ver eso del feminismo.
Más allá de nombres propios, y yendo ya a la política en sí, IU afronta esta legislatura con varios retos. Uno, el conflicto de Pinos, que podría hacer perder el puerto a los mierenses. Otro, la necesidad de dotar de contenido a distintos inmuebles públicos del concejo, como el chalet del notario Vigil, el albergue de La Peña o el chalet de Figaredo. Convendría también que lograsen la colaboración de las administraciones que tantos años llevan reclamando y el cobro de deudas pendientes con algunas de ellas.
Entre los aciertos, la continuidad en políticas como el derribo de inmuebles en estado de ruina y la posterior ejecución subsidiaria de sus costes, la apuesta por nuevas inversiones en polideportivos, colegios y viales, y el afán por dar a Mieres un presigio cultural que adquiere ya tintes internacionales.
Los tres años que quedan de legislatura dirán si Manuel Ángel Álvarez despertará o no el cariño que suscitaba Aníbal Vázquez entre los mierenses y podrá mantener votos como los de un matrimonio de extrema derecha que conozco yo y que votaba a Aníbal porque, simplemente, les caía bien. También esos tres años permitirán descubrir más de este Gobierno local, que en su primer año de existencia ha sufrido de todo y, quizás por eso, no ha estado aún a pleno rendimiento.
ELCARABA
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