Prosigo con mi análisis de lo que ha dado de sí el primer año de legislatura. Si en la anterior edición les hablé de Vox Mieres, en esta hago lo propio con el PSOE.
La candidatura encabezada por el policía jubilado Raúl Moro no consiguió recuperar la confianza del otrora electorado socialista. De hecho, el PSOE marcó su mínimo histórico en unos comicios municipales y pasó de ser el segundo partido más votado a ser el tercero. Unos resultados desastrosos, se miren por donde se miren, con apenas 2.737 votos (un 14,90% del total) que se tradujeron en tres ediles… por los pelos. Contra todo pronóstico, Raúl Moro no renunció a su acta de concejal. Hubo dimisiones, sí, pero en la ejecutiva socialista que avaló este tropiezo electoral. En el grupo municipal la vida sigue igual con Raúl Moro, Jorge Expósito y Silvia Suárez.
Distinta, ese sería el adjetivo que yo utilizaría para definir la oposición que ha hecho el PSOE este año. Han pasado de una oposición más agresiva a una oposición más complaciente. Se ha pasado de la crítica al Gobierno local a la sugerencia de proyectos, actuaciones y lo que, a juicio del PSOE, pueden ser mejoras. Y ojo, porque algunas mejoras a juicio del PSOE no son más que ideas de bombero retirado, o, en este caso, de policía. Cabe recordar que en su programa electoral hablaban de eliminar la raya continua en avenida de México y Vega de Arriba, para hacer giros sin control y devolver el doble sentido a Valeriano Miranda.
En esa línea se ha movido la oposición del PSOE, en hacer propuestas. Algunas más coherentes, otras, totalmente descabelladas. Entre las primeras, sugerir usos para el chalet del notario Vigil, restaurado hace unos años y que sigue sin un fin claro en su horizonte. También es congruente su plan de detección de aceras en mal estado, diseñado a raíz de algo que se habló en el Pleno, en virtud del cual han trasladado a Obras la existencia de unos cuantos desperfectos en varias aceras.
Entre las descabelladas, la prolongación de la línea 3 de Emutsa hasta el barrio de San Pedro a costa de cargarse la parada de Bustiello. No, un servicio público no debe ir en beneficio de unos vecinos y en detrimento de todos. Si de verdad querían dar servicio a San Pedro, bastaba con impulsar una posible recuperación de la línea 8 por semana y revisar el pacto que se suscribió en 2013 entre Emutsa y el Grupo Llaneza.
Habrá que ver qué tal funciona esta oposición de cara a las municipales de 2027 y será un poco antes cuando comprobaremos si el PSOE ha aprendido de sus errores. Confío en que la nueva directiva, liderada por Alejandro Fernández, esté trabajando ya para remontar. Es cierto que lo tienen difícil, pero en política nada es imposible.
ElCaraba
Comentarios
Por otra parte, infórmese bien sobre los cambios que se pretendían en el tráfico, que desde luego no iba a convertirse en "los autos locos". Lo de la parada en San Pedro, fue una propuesta del PSOE, que se rechazó y como en otras ocasiones, reciclada después por IU y puesta en práctica "a mi manera" (aquí música y voz de Sinatra).
En cuanto a la remontada, le agradezco que confíe en ella. El PSOE de Mieres tiene capacidad de trabajo, proyectos de futuro y la convicción de luchar por un Concejo mejor.
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