El
pasado 8 de agosto se celebraba el día de Mieres en la Feria de Muestras de
Gijón. Para facilitar que todo aquel que quisiera ir, fuese, el Ayuntamiento
decidió fletar un autobús gratuito, para el que era necesario reservar plaza en
la sede de la Agrupación Vecinal. Se anunció con carteles publicados en los
tablones de anuncios, en el Twitter y el Facebook del Consistorio. Carteles como este:
Cartel del viaje a la FIDMA organizado por el Ayuntamiento |
La
casualidad quiso que aquel 8 de agosto, a eso de las nueve menos cuarto de la
noche, mientras llovía a cántaros, un servidor pasase por la calle Manuel Llaneza.
Oí que me saludaba un conocido que acababa de salir de un autobús estacionado
en la parada situada frente al colegio Aniceto Sela. “¿Qué vienes de
excursión?”, le pregunté. “No. Venimos de la feria, que era el día de Mieres y
ponía el Ayuntamiento este autobús gratis y aprovechamos”, me respondió.
Todo
esto no habría pasado a mayores de no ser por un pequeño gran detalle que me
llamó poderosamente la atención. En un viaje organizado por el Ayuntamiento,
con la ayuda de la Agrupación Vecinal, lo lógico y esperable era que el autobús
fuese de Emutsa. Pues no: era un autobús de Llaneza, en concreto, el que se
muestra en una de las imágenes que acompañan al artículo.
El autobús, a su vuelta del viaje a la FIDMA |
Tanto
el Ayuntamiento como la Agrupación Vecinal han defendido por activa y por
pasiva a Emutsa. La empresa cuenta con un par de autobuses, los últimos que se
compraron nuevos, que podían haber hecho perfectamente ese viaje, dado que tienen
más o menos el mismo número de asientos que cualquier autocar, en torno a
cincuenta, y están muy equipados en materia de seguridad. Son también más
accesibles, sin escaleras, algo que muchos de los mayores que viajaron a Gijón
aquel día hubiesen agradecido. Es cierto que los autobuses de Emutsa no tienen
maletero, pero el que tenía el del Llaneza que se envió a la feria no se
utilizó, o por lo menos no se abrió en la parada que hizo frente al Aniceto
Sela para dejar a la gente. No era tampoco un viaje demasiado largo. Me contaba
mi conocido que habían tardado poco más de media hora en ir y otro tanto en volver.
No
encuentro ninguna justificación al hecho de tener por lo menos un par de buenos
autobuses propios y acabar contratando uno de otra empresa para realizar un
viaje de media hora. Quiero pensar que no se haya esfumado aquella voluntad de
tirar por Emutsa que el Consistorio y la Agrupación Vecinal escenificaron de
distintas maneras hace unos años –entre ellas viajar a Oviedo en el autobús más moderno de la empresa para presentar las firmas recogidas
en pro de su continuidad ante la Delegación de Gobierno-. Quiero pensarlo,
aunque hechos como este no ayuden demasiado. Espero y deseo que haya alguna
razón que permita justificarlo.
Comentarios
Un saludo de MONTERDE (que no Monteverde)
Un saludo de MONTERDE (que no Monteverde)